domingo, diciembre 10, 2006

El chino feliz

Pues alejándonos del tópico dilema casualidad o destino, hoy he presenciado un espectáculo interactivo digno del mismísimo Cirque du Soleil, pero a lo cutre. El tema es que me estaba descargando un juego para mi PC y, al terminar la descarga, lo abro con entusiasmo y excitación. Pero el mundo se derrumba cuando me percato de que es un puto FAKE. Menudo hijo de puta el que se inventó esa palabra. El juego en cuestión pasó a ser una película de artes marciales titulada "Thai Dragon" (2005) del crack Tony Jaa, al que seguramente os sonará por verlo brincar en "Ong-bak" (2003). Pues bien, la película, como ya era de esperar, es un bodrio infumable. No tiene ningún ápice de sentido. Igualmente me la tragué enterita. No puedo dejar una peli a medias, por muy mala que sea.

Pero una de cal y otra de arena. Al final de la peli, cuando ya le prestaba más atención al volar de las palomas que al susodicho film, mi sufrimiento fue compensado por una escena realmente espectacular que precisamente está en el Tubo de You. Realmente impresionante.

PD: Mola la entrevista que le hace Buenafuente al mismo Tony.

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