sábado, septiembre 30, 2006

Lista Negra

Con lo malo también se aprende. Se aprende a no cometer nunca más el error de volver a visionar ese film, se aprende a que más bajo no se puede caer, se aprende a poner el listón aun más alto para les películas que sí te pueden gustar. Pero es que lo peor que he hecho en mi vida, aparte de cagarme encima cuando era pequeño, es ver estos auténticos bodrios, este pasto de las más apestosa de las mierdas inmundas. Por diós, que venga Napoleón y les cercene el cuello a todas y cada una de las personas que han tenido algo que ver con estos proyectos, hasta al de los cafés. Empezamos con el quinto porque asi le damos más emoción al puto asunto:

5. Siete Espadas (Tsui Hark): Un auténtico bodrio alli donde los haya. Se podía hasta sentir el olor a mierda que desprendian las bobinas en la sala de proyecciones. ¿De qué va? Pues nose, lo que me pareció entender es que habían siete espadas buscadas por un grupo de japos. Una parrafada oriental que aporta menos que el programa de Salsa Rosa. Un pequeño apunte que quiero constatar es que fuimos unos cuantos a ver la película y uno de mis colegas potó literalmente al salir del recinto. No es broma.

4. Kazaam (Paul Michael Glaser): No malgastaré ni tiempo, ni neuronas para escribir cualquier cosa sobre este insulto andante. La mayoría de gente solo sirve para una sola cosa. Si te dedicas al baloncesto, no prueves con el cine, porque la vas a cagar. Es el caso de Shaquille O'Neal que cuando acabé, si señores ACABÉ, de ver esta pedazo de mierda, me entraron ganas de llamar al Ku Klux Klan, respetando a toda la gente de color, evidentemente. Pero a ese mamón le hubiese caido una lluvia de palos. La peli esta va de un mago (O'Neal) que ayuda a un pobre chaval a luchar contra las bandas del patio. Simplemente horrible, sin exagerar. Pero bueno, me quedo antes con esta que con la siguiente de la lista.

3. Un Santa Claus con músculos (John Murlowski): Y es que fuera del ring se puede hacer todavía más daño. Hulk Hogan juega con la inocencia de los pequeños chavales que aun creen en la navidad para 1). Acabar odiando a Santa Claus y 2). se conviertan en pequeños delincuentes ya que después de ver este detrito de la sociedad americana, matar a Santa Claus sería una declaración de Paz. No hace falta que os explique de que va, pero imaginaos a Hulk Hogan repartiendo hostias (más falsas que un calendario de horas) vestido de Papa Nöel, para "salvar" a unos pobres e indefensos chavales de barrio.


Bueno, hasta aquí suficiente por hoy. Sé que faltan las dos peores, pero me reservo un post entero para profundizar en esas dos obras de arte que, creedme, son mucho más nefastas que las ya comentadas anteriormente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

dios mio!!!